29 de abril de 2008

ella era maravillosa...


equis estaba triste, no había comido su cena, se la dio todo a su perro argos; él estaba triste por ella. todo le asfixiaba. prendió su computadora pero nada era iwal sin ella.... estuvo escribiendo como poseso, siempre ke estaba triste él escribía bastante. escribía y cuando casi terminaba lo borraba todo. la vida era para equis tan injusta. el destino siempre se burlaba de él. las ráfagas de felicidad ke podían llegar a su vida eran solo el eco de una alegría de otro. y así pasaba su vida. entre la monotonía y el aburrimiento.

pero desde ese dia de fines de marzo ke entro al jai y encontró a ella. su melancolía había cambiado. ya no era el mismo ke caminaba sin sentido, ya no era el mismo tonto melancólico. llegaba a casa ansioso por prender la computadora. pero al final cuando la apagaba, se iba triste a su cama, porke siempre ke algo bueno pasaba en su vida, lo tenia ke perder. encerrado en su cubil oscuro, equis lloraba en un rincón donde nadie podía verlo, donde nadie podría escucharlo, donde nadie llegaría a ayudarlo y tenderle la mano. así pasaron los días, iwal ke todos. él le contaba todo lo ke le pasaba. ella escuchaba y a veces reía. y su risa él la imaginaba como el sonido de la brisa, como el piar de un pajarito, como el canto de la luna llena. eso era magia. ella era mágica. ella era maravillosa.

todo era como un cuento de hadas, como las historias ke los juglares medievales cantaban. como las rapsodias de los poetas griegos. era como un amanecer de arco iris, como el correr de un río cristalino, esos días eran maravillosos. pero todo el hechizo de la luna se terminó una noche de un jueves del mes de abril. toda la mierda ke equis llevaba en la cabeza reventó. todos sus demonios salieron y el se transformo en un ser malo. en un moderno doctor Kelly y mister Hyde. pero él no era así. el era el lobo solitario de las estepas. él era la roca ke el mar golpea. él es la otra mejilla de cristo. pero esa noche aciaga el se cegó por los celos. y no trato suavemente a la mujer ke lo amaba. y con eso mato lo ke empezaba a ser un sueño de hadas.

un domingo ella le dijo ke nunca mas le escriba y ke desapareciera de su vida. equis se sintió desfallecer ese momento, hubiera kerido arrancarse los ojos por haber leído eso. hubiera preferido lanzarse al vacio como lanzaba al vacio sus sollozos. recordaba cuando sus antiguas enamoradas habían terminado con él. como cuando vio a su enamorada entrando a un hostal con otro. o como cuando la ultima mujer ke lo dejo le dijo ke no lo amaba y prefirió irse en la buskeda de otro. o como cuando la ultima chica ke paso por su vida le dijo ke le daba asco darle un beso... la misma historia se repetía, todo en la vida de equis iba en circulo. toda su mala suerte se aparecía de nuevo. otra vez había fracasado. otra vez lo habían pateado en el suelo. otra vez lo habían humillado. otra vez estaba solo, como siempre fue y siempre será.

ahhh ke felices hubiéramos sido juntos, pensaba mientras navegaba en su cama... pero la vida para él no le pertenecía. nunca ninguna chica lo comprenderia. nunca ninguna chica se la jugaría por él. su mente estaba llena de sonidos de monos chillones. equis estaba maldito, estaba bajo el signo de caín. era un leproso ke todos rehuían. era un rufián perseguido. él cada día huía de su soledad pero esta como perra en celo lo perseguía. si tan solo encontrara una chica ke lo comprendiera y lo amara, se dijo en silencio, ke distinto seria todo.

equis sabia ke tenia ke volver a si mismo. caminar el mismo camino tortuoso de siempre. ir cabizbajo. caminar lento y casi encorvado. tenia ke volver al silencio de su cubil. tenia ke tragarse la impotencia de verse perdedor. la vida otra vez se había burlado de él. Dios otra vez le había dicho ke no. equis tenia miedo a la soledad de su vida, pero tomo un sorbo de aliento, como akellos guerreros ke se enfrentan a un ejercito superior, y salio a fajarse con su puto destino. como siempre había sido, como siempre será.